Copia fiel es una película del director iraní Abbas Kiarostami que se estrenó en el 2010. Está protagonizada por Juliette Binoche y William Shimell y se ubica en la toscana italiana. La trama gira alrededor de un escritor inglés y una comerciante de antigüedades francesa quienes discuten sobre el concepto de la originalidad en el arte y cuya relación cambia drásticamente a lo largo de una jornada.
La película comienza con la presentación del libro del escritor (William Shimell) el cual deja perpleja a Juliette, pues éste habla sobre el problema de la originalidad de las obras de arte y ella se dedica a vender piezas antiguas y originales. El planteamiento del libro se pregunta si tal vez las copias de arte no son en realidad igual de valiosas que las originales debido a que generan experiencias estéticas genuinas si se ignora su condición de reproducciones. Conforme los personajes se van conociendo en los bellos paisajes de la Toscana Italiana los diálogos, muy al estilo de Kiarostami, se vuelven esenciales y se van potenciando conforme se reproducen las tomas fílmicas. Muchas de éstas a lo largo de la película no enfocan directamente a los actores sino que los muestran a través de reflejos, volviendo a la imagen una doble copia, la de la película misma y la del reflejo grabado.
Una pequeña visita a un museo, la contemplación de unos cipreses, y un café capuchino son tres escenarios donde los personajes contemplan y hablan sobre el problema de la originalidad del arte y sobre sus mismas vidas en el pequeño pueblo de Lucigniano. Al principio de la película son tan sólo extraños y ahora su relación se ha desarrollado y parecen conocerse de todo la vida. Es más, parece que están actuando como marido y mujer. Esta transición temática se introduce a partir de pequeños vaivenes entre las dos narrativas, generando un tornado de confusión en el espectador. Aquí, una vez más, nos encontramos con niveles de la copia; el primero: los actores en sí mismos, el segundo: los actores actuando como desconocidos que conversan y el tercero: los actores actuando como una pareja. El resto de la película continuará por esta línea. Blanchot se convertirá en una madre dedicada y Shimell en el padre ausente concentrado en su trabajo. Finalmente, la película termina de manera inesperada dejando un aura de anticipación a lo que podría pasar después, pues la incertidumbre de la situación real de los personajes es abrumadora. Sin embargo, no existe la situación real de los personajes, pues estos sólo son una copia o una representación de las ideas de un director que quiere sacar al arte del enredo conceptual en el que se encuentra debido al carácter original al que se le atribuye.
No está de más mencionar que yo vi la película en su presentación de DVD pirata.
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